lunes, 25 de julio de 2016

Alfambra. Historia de la construcción de la iglesia actual.



 Si les apetece pueden acudir el próximo día 2 de agosto, a las siete y media de la tarde a la charla de ampliación que se celebrará en el Ayuntamiento de Alfambra..



                         Conocer la historia de Alfambra (Teruel)
                    El edificio de la iglesia. Historia de su construcción
La actual iglesia de Alfambra hacia 1930. (Cortesía de Joaquina Castellano)





Altar mayor de la iglesia de Alfambra hacia 1930. (Cortesía de Joaquina Castellano)

                        



La torre de la iglesia de Alfambra hacia 1960. Tomada de la web "Teruel en imágenes"

La torre de Alfambra en 2015.

El cuerpo y la torre de la iglesia de Alfambra en 2015.

La iglesia de Alfambra vista desde la bajada de iglesia vieja. Foto tomada de la web "Teruel en imágenes".






   Año 1.447.-

. En el folio 632 del Índice de Espés conservado en La Seo de Zaragoza se lee: “La iglesia del lugar de Alfambra era por el tiempo pequeña y el retablo mayor muy pobre y casi perdido de viejo, y considerado por el Comendador fray Bernardo Hugon de Rovaberti que poseía aquella Encomienda lo que necesitaba se ampliase la iglesia y lo que convenía hacer un retablo de nuevo deliberó de hacerlo. Así a 27 de julio el Arzobispo le dio permiso para ampliar la iglesia y asentar el retablo mayor de nuestra Señora que se había labrado de nuevo”.

Año 1.597.-

. En el Archivo histórico nacional, OO.MM. 8132, aparece  Jaime Felipe, síndico de la villa de Alfambra y dice que “la iglesia no puede ser ampliada en su sitio lejos y en sitio áspero. La mayor parte del año … no se puede subir a ella y muchos de los vecinos no pueden asistir a los oficios divinos, además de por su antigüedad está muy derruida y perdida y ser tan corta y la villa estar tan aumentada y la mitad de su gente no coge en ella”.

Año 1.598, 11 de agosto.- (A.H.N. OO.MM. 8132).- 

. “Nosotros fray Hernando Ruiz de Prado y fray Carlos Ferrán hacemos fe y verdadera relación que … nos fue presentado un instrumento público de comisión en el cual se nos manda hagamos visura del sitio y patio donde está la iglesia de dicha villa de Alfambra y la descomodidad que hay para que los vecinos de dicha villa suban en el tiempo de lluvias a oir misa a ella… Hemos visitado dicha iglesia la cual está algo apartada del lugar y en subida de manera que se echa de ver claramente que en tiempo de nieves aguas y calores está muy desacomodada y apartada del lugar para poder oír misa a ella.”

Año 1.627.- (A.H.N. OO.MM. 8134). 

. Se firman unas capitulaciones entre la Villa y la Castellanía de Amposta a la que está sometida la Encomienda de Alfambra. Son prolijas estas capitulaciones. Selecciono algunos apartados.

         . Tres años antes se le hizo gracia a la villa del pago de la mitad de la primicia, perpetuamente, para que con ella se hiciese y fabricase iglesia nueva.

         . En este año 1627 se propone que la primicia eximida sea por años limitados.

         . Se pide que el Concejo de la villa entregue unas casas para que las habite el Comendador.

         . 6.500 escudos (130.000 sueldos jaqueses) pagará el Comendador que de presente es de la villa de Alfambra y el Comendador y Comendadores que por el tiempo serán de la dicha villa y Encomienda en tiempo y por tiempo de 26 años.

         . Para su construcción los jurados, oficiales, vecinos y moradores de la villa de Alfambra se obligan a fabricar una iglesia nueva, torre y cementerio en la parte opuesta en que ahora está la ermita de santa María Magdalena. Para lo cual la villa debe dar y comprar todos los sitios que fueran necesarios para levantar la iglesia.

         . La villa y el Concejo se obligan a principiar y hacer fabricar la iglesia nueva, torre y cementerio en un plazo de diez años.

         . La villa podrá mudar a la iglesia nueva las campanas de la vieja.

         . La villa se obliga a conservar como ermita la iglesia vieja.

         . Si el señor Comendador quisiera hacer un pasadizo desde sus casas hasta la iglesia tendrá facultad para hacerlo.

         . Los documentos de esta capitulación se guardarán en un archivo con tres llaves. Una la tendrá el Comendador, otra el Jurado mayor, otra el Vicario o Prior de la iglesia.

         . El dominio o propiedad de dicha iglesia nueva será perpetuamente de la Orden de San Juan de Jerusalén.



Año 1.659, 14 de junio.- (A.H.N. OO.MM. 8134)l

                  . Se entrega la iglesia de Alfambra terminada. La recibe en nombre de la Castellanía de Amposta el Comendador de Orrios y Albentosa D. Francisco de la Figuera, ante el notario de Alfambra Domingo Escobedo y los regidores de la villa Diego Galindo, Gerónimo Felipe y Blas Bellido.

         . Los Maestros Albañiles Martín de Abraria y Domingo Yzquierdo entregan un documento al Comendador en donde se dice que la piedra labrada y mampostería de la iglesia la hallan con toda perfección, la torre está de piedra bien trabajada, las bóvedas bien montadas y trabajadas, las dos sacristías con toda perfección, el ladrillo de la iglesia algo desguarnecido debido a las sepulturas que se han abierto después que se enladrilló, la portada de la iglesia de piedra y de algez está con toda seguridad y firmeza conforme al arte.



       Año 1.731. (A.H.N. OO.MM. 8131).  Reedificación de la torre.

         . En el Proceso de los mejoramientos de la Encomienda de Alfambra relatados por su Comendador fray Vicente Zapata de Calatayud se habla de la reedificación de la torre.

         . Cuatro años antes, en 1727, “se halló desmontada la torre de la iglesia parroquial y a fin de que se pusiese nueva y cumplidamente construir hizo depósito de dos mil libras, moneda valenciana, en la caja de la Recibiduría de dicha Castellanía y para la dicha reedificación le fue concedido el tiempo de cuatro años”.

         . El Maestro Albañil Juan Francisco Garcella justifica que dicha torre es de fábrica suntuosa y bella según su planta y perfil, con sus esquinas y contraesquinas labradas, con su talud en el primer cuerpo, con su vocelón de piedra labrada en el tercero, su cornisa de donde mueve el cuerpo de campanas, con sus perdernales, sus pilastras, capiteles, alquitrabes, friso y cornisa, con sus ventanas rasgadas, con sus bóvedas y barandilla, pirámides, bolas, remate correspondiente, con sus cantellas en los cuatro ángulos, segundo ventanaje y encima una aguja bien proporcionada, todo según arte y arquitectura, con su escalera muy buena a la castellana.



         . Año 1.937.- Como consecuencia der la guerra civil se destruye el retablo del altar mayor y casi todo el coro.

         . Hacia 1960 se reforma el coro y se hacen desaparecer los restos que quedaban de él.

         . En los años setenta del siglo pasado se levanta el suelo y se sustituye por el actual. Desaparecen casi todos los restos de lápidas y sepulturas efectuadas en la iglesia.

         . En 2.010 se instala un nuevo retablo en el altar mayor.

        . En 2.012 con motivo del hundimiento de una capilla se observan restos de sepulturas. Tras su excavación se reconstruye una lápida grabada en granito negro de la familia Sánchez Muñoz.

         . En 2014, sobre la pared del coro, se superponen pinturas litúrgicas.
                . En 2.015 se protege la cimentación exterior de la iglesia para protegerla de la humedad.

        
        
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viernes, 15 de julio de 2016

Fiestas en Orrios.



    Ahí les dejo mi colaboración de este año en las fiestas patronales de Orrios en los días finales de julio.  La recibirán impresa sore papel junto al programa de fiestas.
    Con mi deseo de que disfruten las fiestas.
    Ojalá sean fraternas y respetuosas.
    





miércoles, 13 de julio de 2016

Venezuela no existe, Teruel tampoco.



       Se acabó la intoxicación del bla, bla, bla de las elecciones. Ya no interesa que Venezuela exista. Como Teruel que sólo existió la última tarde del cloaqueo del bla, bla, bla y televisivo. Por allí apareció el Presidente en funciones de no sé qué ... fuese ... y no hubo nada.
     Pero Venezuela existe y Teruel existe.
Aunque en ocasiones los espíritus malignos aparecen en la historia de cada quien. Así me ocurrió a mí en el veraoo del año 2.000, cuando me encontré la aparición en carne mortal de nuevo, según los cánones inquisitoriales de la iglesia católica eterna, del mismísimo loco y enloquecedor Lope de Aguirre, baztanés sin rumbo ni ley, quien quemó, destruyó, degolló a cuanto ser se le puso por delante, incluida su propia hija, en las tierras de los llanos venezolanos, en los mismos lugares en donde nació y creció el autodeclarado bolivariano Hugo Chávez.
     Lean si les apetece el texto, algo largo, que apareció publicado en febrero de 2.001 en la Revista "Trébede" (mensual aragonés de análisis, opinión y cultura).
      Tal como ocurrió lo conté. Sólo cambié algunos nombres propios.
   









miércoles, 6 de julio de 2016

Por el parque de su nombre









         Todas las mañanas mi nieto Miguel y yo le damos los buenos días cuando entramos en el parque que lleva su nombre.
         Todos los días de este invierno y primavera ya pasados y ahora con los primeros calores sofocantes de esta ciudad que él tan bien conocía y a la que tanto quería.
         Él guarda silencio y quizás en algún rincón de la galaxia madre, convertido en polvo de estrellas, nos sonría con su gesto de siempre y nos devuelva el saludo que nosotros no oímos. No lo oímos, pero lo escuchamos mientras iniciamos nuestro camino matutino por los paseos que nombran a Manuel Azaña y a José Luis Sampedro. De inmediato Miguel quiere llegar a los asientos del tren que él llama chuchú. Me hace subirlo y bajarlo una y otra vez y seguimos, protegidos por la sombra de los altos plátanos, hasta los primeros juegos infantiles con el deseo que lo columpie y, en cuanto descubre el primer estanque con sus chorros de agua, recoge una y otra piedra diminuta con sus manos y quiere tirarla al agua y ríe y ríe con el ruido amortiguado que produce. Coloca en la baranda sus pequeños animales y juega y juega con su perro y su gato y su oveja y su vaca y su caballo y su pato talismán. Y nos llegamos hasta la rosaleda e introduce sus dedos entre los agujeros que aprisionan a los pájaros en su jaula y les pone unas migas de pan para que picoteen. Y me empuja hasta la pequeña cascada donde se inicia el riego de este parque zaragozano tan hermoso que ahora lleva el nombre de José Antonio Labordeta. Y allí se queda diciendo aguaagua y riendo y riendo otra vez. Nos quedamos por allí jugando con sus animales o cogiendo hojas o removiendo las aguas de la acequia mayor con los palos que ya tanto le gustan y me señala el león erguido conmemorativo de los Sitios al que sigue llamando guauguau. Y quiere mojarse las manos en el grifo de la fuente de Fleta y si hay charcos por los riegos del césped chapotea y chapotea con sus pies. Y ríe y ríe. Y cuando regresamos por el paseo de los bearneses corre y corre hasta llegar a la cascada que desciende desde los pies del pétreo rey Alfonso y otra vez dice aguaagua. Y más agua por el paseo central mientras persigue a las palomas que vienen a comer las migas que les tira.
         En ocasiones se duerme atrapado por el sueño inquieto de sus noches de año y medio. Entonces yo camino en silencio con él y nos llegamos más lejos por el rincón de Goya e incluso subimos hasta el Cabezo y regresamos por los mismos caminos o me siento en un banco y rememoro recuerdos de los lunes de Andalán, o las tertulias en la cripta del Levante, o los encuentros en Parzán mientras sonaba el himno de Riego, o de las patas con bacalao en el Moncayo, o las noches estrelladas de las tierras altas de los pueblos perdidos de Teruel en los veranos fieles a la cita con el hombre de voz ruda y tierna, o la generosidad mostrada cuando me entregó los papeles de su hermano Miguel.  Algún día les hablaré a Max, a León, a Jorge y al pequeño Miguel de su bonhomía.
         Y yo guardo silencio un día y otro, y él también, mientras dialogamos con los sucesos que no nos dejan en paz en estos días pasados de tantas mentiras, de tanta intoxicación en radios, en periódicos, en televisiones, de tanto y tanto cloaquero.  ¡Qué hartazgo! dice y me digo.
         “Hala, hasta mañana” le oigo con su voz profunda, mientras ya Miguel ha cogido una hoja de las flores que siempre están vivas delante de su nombre. Y me la ofrece mientras me dice “abu, abu”. 
         Ya ves, tú “abuelo” y yo “abu”.   Hasta mañana.



l Moncayo, jota aragonesa, canta: Fernando Checa - YouTube

https://www.youtube.com/watch?v=gAuIidhTH1g
1 nov. 2007 - Subido por jotaire
HE DE SUBIR AL MOCAYO PARA ECHARLE UN PULSO AL CIELO Hace unos años, todos los joteros de ...