Llevamos quince días confinados. Nos quedan, de momento, otros quince.
Es un momento difícil.
No podemos bajar la guardia.
Algún día volveremos a salir.
El sol, el verano, la trilla, las gentes, la vida nos recibirán de nuevo.
Y espero que entonces hayamos aprendido algo.
Asómate a la ventana cuando vuelva de la siega, que a un segador no le importa que le dé el sol en la cara.
Ánimo, a seguir, no rebles mujer pulida.
no rebles hombre templao.
3:09
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